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Esos días que veas que la suerte te abandona, debes estar dispuesto a retirarte en cuanto gastes el dinero que tenías previsto utilizar ese día en juegos de azar. No sigas arriesgando tu duramente ganado dinero con la difícil esperanza de que la suerte te dará una revancha y terminarás llevándote el bote a casa.
Si eres un jugador inteligente, nunca te verás en la situación de conservar desesperadamente la esperanza de recuperar el dinero de tu renta; simplemente habrás agotado el dinero que habías designado para jugar ese día, pero serás capaz de volver mañana.
Más allá de todos los consejos que te pueda dar, desarrollar un fino sentido de oportunidad es de suprema importancia. Cuando juegues Blackjack, por ejemplo, jugar cansado o jugar después de haber bebido unas copas (o demasiadas) puede costarte caro. Es importante que aprendas a identificar cuándo estás en tu mejor momento y solo entonces jugar.
El desarrollo de esta actitud no suele llegar naturalmente, sino que lleva mucho trabajo conseguir sentirte cómodo con el éxito que proviene de la disciplina de un jugador de casino que juega con un plan ajustado a sus necesidades.
Si eres capaz de dominar tus deseos y tus emociones, entonces y sólo entonces serás capaz de convertirte en uno de los más grandes jugadores de juegos de azar del mundo, capaz de disfrutar de la emoción y la alegría de ganar, y soportar con entereza y sin desánimo cuando te toque perder – que inevitablemente algún día te tocará.
Solo tienes que estar preparado sicológicamente para ambas situaciones!