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La personalidad y carácter de las personas muchas veces marca una tendencia en sus actitudes sociales y de interrelación con el entorno. Dentro de este marco encontramos que no es tan alocado mencionar que cierta personalidad o tendencia de actitudes de la persona marquen un claro camino hacia el tipo de apuesta que debería realizar.
Agresivos. Cuando hablamos de agresivos no estamos mencionados a personas agresivas en el sentido de ser violentas, sino de ser quienes toman los riesgos más grandes a la hora de realizar apuestas.
Este tipo de personalidad es muy común en los jugadores de poker, obviamente aquellos que ganan más de lo que pierden, es necesario una cuota de agresividad para jugar al juego de poker, dado que siempre se estará jugando al límite cuando el bote supere nuestras expectativas, es necesario conocer la diferencia entre retirarse honorablemente y perder estúpidamente, pero para eso hay que ser bastante inteligente y no tener miedo a tomar decisiones duras y de un gran impacto en un tiempo muy corto.
Personalidad pasiva. Ciertamente muchas veces acompañada de actitudes metódicas y claramente con tendencias a usar la lógica ante los instintos, este tipo de jugadores ocasionalmente son comunes en juegos como el blackjack, que necesitan una gran tranquilidad mental y una habilidad con los números impresionantes, también es común que tengan esta cualidad los apostadores profesionales de ruleta.
Dentro de un espectro mucho más grande encontramos a los apostadores y jugadores de tragaperras que generalmente no tienen una personalidad o no se puede incluir a los jugadores de tragaperras dentro de un grupo en concreto.